sábado, 20 de noviembre de 2010

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

Paz, mis queridos hijos, ¡paz!

Queridos hijos, los amo e los invito a la oración. Oren mucho por las familias, por la Santa Iglesia y por el Santo Padre. Sus oraciones son preciosas e importantes para la realización de mis planes maternales. Ayuden a su Madre Celestial a conducir muchas almas a Dios.

Aquí hay un lugar, preparado por su Madre Celestial, para recibir la bendición del Señor y mi bendición maternal. Quiero ayudarles a convertirse en de Dios. Arrepéntanse de sus pecados, hagan reparación, para que siempre tengan la gracia de Dios en sus vidas.

Hijos, decidan ahora por la conversión y la santidad. Dios los está llamando. No dejen que el Señor los espere. Regresen ahora, ahora, ahora, ¡porque no saben lo que el mañana traerá! Los invito a la oración, la conversión y la paz. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!

(*) El lugar de las primeras apariciones de Nuestra Señora en Manaus, en el hogar. Nuestra Señora me hizo entender que apareció en un hogar familiar, para mostrar a la Iglesia y al mundo la importancia de las familias para ella y para su Hijo Jesús y su preocupación maternal hoy por cada familia que se está destruyendo y perdiéndose en el pecado.