Mensajes para Marcos Tadeu Teixeira en Jacareí SP, Brasil

 

domingo, 24 de noviembre de 2013

Mensaje De Nuestra Señora - Comunicado Al Vidente Marcos Tadeu - 157ª Clase De La Escuela De Santidad Y Amor De Nuestra Señora

 

Mira El Video De Este Cenáculo:

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La Hora de San José

Meditación del Santo Rosario

Proyección De La Película Voces Del Cielo 6 - Las Apariciones De La Santísima María En París, Francia En 1830 A Santa Catharina Labouré - Revelación De La Medalla Milagrosa

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Jacareí, 24 de Noviembre de 2013

157ª Clase de la Escuela de Santidad y Amor de Nuestra Señora

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Mensaje De Nuestra Señora

(María Santísima): "Amados hijos Míos, hoy, cuando ya estáis conmemorando el Aniversario de Mi Aparición en la Capilla de la Rue du Bac de París a Mi hijita Catalina Labouré, vengo una vez más a deciros: Soy la Inmaculada Concepción, soy la Mujer vestida del Sol terrible como un Ejército en Orden de Batalla que marcha con los Ángeles, con los Santos y con los hombres de buena voluntad contra Mi enemigo, el demonio, la serpiente infernal que mostré bajo Mis Pies aplastándole la cabeza cuando revelé Mi Medalla Milagrosa a Mi hijita Catalina Labouré.

Mi misión es luchar contra este Mi adversario, el demonio, contra los ángeles malignos y todos los hombres de mala voluntad, de mala voluntad que existen en este mundo y que luchan contra Cristo, contra la fe católica, contra Mí, desacreditándolos a todos, desenmascarando sus falsedades e insidias, mostrando quiénes son los lobos con piel de oveja. Y, verdaderamente, denunciando en Mis Apariciones toda la Apostasía, todo el error, todo el pecado, para que Mis hijos puedan liberarse de toda la oscuridad, de toda la ceguera espiritual, de todo el cáncer espiritual del alma, de todo el pecado mortal. Y así, puedan conocer verdaderamente la verdad, ser liberados por la verdad y salvados por la verdad.

Yo soy la Inmaculada Concepción y, por eso, revelé a Mi hijita Catalina Labouré esta poderosísima invocación: “Oh María concebida sin pecado, ruega por nosotros que recurrimos a Ti”. Te di esta invocación grabada en Mi Medalla Milagrosa, para que, a través de ella, pudieras llamarme, invocarme dondequiera que estuvieras. Y Yo podría entonces ayudar a Mis hijos con Mis gracias, con Mi Amor maternal, con Mi Misericordia, liberándoles de todos los peligros, previniéndoles de todos los males y tentaciones que Satanás quiere infligirles. Liberándolos de las cadenas del pecado, y sobre todo, cada vez más, aumentando en ellos la gracia, la fe, el amor, la esperanza, la caridad, la pureza y todas las demás virtudes por las gracias continuas que derramo de Mis Manos cada día sobre Mis amados hijos.

Yo soy la Inmaculada Concepción, y por eso me aparecí a Mi hijita Catalina Labouré, llena de esplendor y de gloria, para advertiros que ya había llegado la plenitud de los tiempos, la plenitud de los tiempos de la batalla entre Yo y Mi enemigo, entre la Mujer vestida de Sol y el gran dragón, la serpiente infernal.

En efecto, con Mis apariciones en la Rue du Bac, ha comenzado el tiempo decisivo de Mi batalla contra Mi enemigo, aquel tiempo que profeticé a Mi hijita Mariana de Jesús Torres en Quito, Ecuador. Y que con Mi aparición a Mi hijita Catalina Labouré, di verdaderamente plena continuidad a Mis Planes Maternos, di plena realización a los designios amorosos de Mi Corazón, a los Planes del Altísimo, e inicié la guerra decisiva, definitiva, contra Mi adversario.

Y antes de que lograra sus primeras victorias, antes de que diera curso a sus nefastos planes, vine y me aparecí a Mi hijita Catalina Labouré, revelándoos todo lo que debía suceder entre el año 1830 y el comienzo del siglo XX, el año 1900, para poneros en guardia contra Mi adversario y sus fuerzas. Y luego, en las Apariciones posteriores en La Salette, Lourdes, Pointmain, Pellevoisin, Knock y todas las demás, seguí llamándoos continuamente a la oración, a la penitencia, a la conversión y a luchar Conmigo con estas armas que os he dado contra Mi adversario y todas las fuerzas que se oponen a Mi hijo Jesús, a Mí y a la Santa Fe Católica en el mundo.

Vosotros sois Mis soldados que tenéis que luchar ahora Conmigo, hijos Míos, hacia el Triunfo de Mi Corazón Inmaculado en esta última hora de la gran batalla que estoy librando. Mi hijita Catalina Labouré, fue una obrera de la primera hora y vosotros sois los de la última hora, sois los que verdaderamente debéis recoger los frutos de la viña y entregar estos frutos al Dueño de la viña que ya está a las puertas, es decir, Mi Hijo Jesús que ha de volver pronto a vosotros con gran gloria y poder para establecer el Reino de Su Sagrado Corazón entre vosotros.

Prestad atención a la Parábola que Mi Hijo contó en el Evangelio, vosotros sois los obreros de la última hora en aquella viña, que el dueño de la viña cultivaba y en la que empleaba siervos cada hora del día. Sois los siervos de la última hora, por tanto, haced bien vuestro trabajo ahora, sed serios, responsables con vuestra misión, que no es una broma, porque están en juego almas, almas humanas en esta misión y no podéis ser ahora irresponsables descuidando la salvación de vuestra alma y la salvación de las almas de los demás.

Así que reza, medita Mis Mensajes, trabaja, camina, habla, lucha, lleva Mi Amor a todos Mis hijos para que se conviertan y se salven. Quien ponga todo su corazón, todo su ser en esta noble misión, recibirá de Mi hijo, una gran recompensa en el Cielo por todos los trabajos, molestias y contratiempos por los que ha pasado a causa de tan alta, tan noble misión.

Id Mis Apóstoles, llevad la luz a todos Mis hijos que están en tinieblas, trabajad en la viña del Señor mientras aún es de día, y el Señor no ha venido todavía, porque cuando venga hará cuentas con todos, y ¡ay de los siervos a los que haya encontrado durmiendo perezosamente, sin haber trabajado en Su viña! Id y llevad Mis Mensajes, Mi Amor y la Verdad a todos Mis hijos, para que todos Me conozcan, Me amen y sigan Conmigo por el camino de la Oración y de la conversión hacia el Cielo.

Soy la Inmaculada Concepción, soy la santidad misma, soy la pureza, soy la gracia, estoy tan llena de gracia que puedo decir que soy la gracia, soy la Aurora, es decir, soy la santidad perfecta de Dios en la Tierra. Yo soy la que anticipó el gran amanecer de la redención para los hombres, y así como la Aurora precede a la venida del Sol, con Mi Inmaculada Concepción, Mi pureza, Mi oración y Mis méritos, aceleré para vosotros la venida del Verbo, la venida de la Redención, del Redentor de la humanidad, trayéndoos la liberación del pecado y abriéndoos las puertas del Paraíso que habían sido cerradas por el pecado original.

Yo soy verdaderamente la Luna, porque brillo para todos Mis hijos que mienten, que caminan en las tinieblas del pecado, que están perdidos en la noche del pecado mortal, haciéndoles ver el camino de regreso al Padre y volver a los brazos de su Señor y de su Salvador que les espera con amoroso anhelo para salvarles.

Yo soy el Sol, porque brillo con la luz de Mi santidad, de Mi perfección, de Mi pureza en el Cielo de la Iglesia, en el Cielo de la humanidad iluminando tu camino para que recorras el camino de la santidad y de la salvación que conduce a Dios y al Cielo, sin error, sin vacilación, sin lentitud, ni equivocación alguna.

Camina por Mí, es decir, obedece Mis Mensajes, ve a través de Mí al Padre, y Él no te rechazará. Ve a través de Mí al Padre, y no errarás en el camino. Id a través de Mí a la Santísima Trinidad y tendréis la certeza de llegar a Ella: santa, inmaculada, perfecta y formada por Mí, en esa perfección espiritual, belleza y santidad que agrada a Dios.

A todos en este momento quiero decir: Mis Apariciones en la Rue du Bac en París, que fueron el comienzo de Mi gran Plan de Salvación, estas Apariciones, las he continuado en todos los lugares de la Tierra hasta llegar a Mi última Aparición, que es ésta de Aquí. Aquí terminaré verdaderamente los Planes que comencé, y conduciré a toda la humanidad y a cada uno de vosotros también al Triunfo perfecto de Mi Corazón Inmaculado.

Así pues, ¡adelante! ¡Non avete paura! ¡No tengáis miedo! Vuestra Madre, que en la Medalla Milagrosa dada al mundo hace tantos años, vuestra Madre que en la Medalla Milagrosa aparece gloriosa, invencible, inalcanzable, aplastando la cabeza de la serpiente infernal es ya para vosotros la garantía, la promesa segura de que al final triunfaré, aplastaré la cabeza de Satanás y de todas sus fuerzas diabólicas en el mundo y conduciré a toda la humanidad y a cada uno de vosotros al Triunfo definitivo de Mi Corazón Inmaculado.

Vuestros ojos verán maravillas que nunca imaginasteis ver, vuestros oídos oirán cosas maravillosas que nunca oísteis ni sentisteis, experimentaréis una paz y una felicidad inauditas, desconocidas sobre la faz de la tierra que os serán dadas en el Triunfo de Mi Corazón Inmaculado.

¡Adelante! Yo estoy con vosotros y os ayudaré, os cubriré con Mi Manto y os conduciré cada vez más al cumplimiento perfecto del Plan del Padre.

Os bendigo a todos en este momento con Amor desde la Rue du Bac en París, desde Lourdes y Jacareí.

Paz Mis queridos hijos, paz a ti Marcos, el más trabajador y obediente de Mis hijos".

(Marcos): "¿La bendición que diste se extendió a todas las medallas Milagrosas? Sí. Diré que sí.

Hasta pronto querida Madre Celestial, hasta pronto".

Transmisiones en directo desde el Santuario de las Apariciones en Jacarei - Sp - Brasil

Emisión «Apariciones Diarias» en directo desde el Santuario de las Apariciones de Jacareí

Lunes a Viernes, 21:00 horas | Sábado, 14:00 horas | Domingo, 09:00 horas

Entre semana, 09:00 Pm | Los sábados, 02:00 Pm | Los domingos, 09:00Am (Gmt -02:00)

Orígenes:

➥ MensageiraDaPaz.org

➥ www.AvisosDoCeu.com.br

➥ www.AparicoesDeJacarei.com.br

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