jueves, 21 de agosto de 2014

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo

A Su Amada Hija Luz De María.

Mi Amado Pueblo, Yo Os Bendigo, Mi Paz Sea Sobre Vosotros.

Soy Misericordia Infinita Y Como Tal Permanezco Atento A Vuestras Necesidades Y Peticiones.

Soy Dios De Amor Y Veo Pocas Almas Que Son Reflejo De Mi Amor En La Tierra, Pero Esas Pocas Almas Las Multiplicaré Hasta El Infinito Cuando Sea NECESARIO.

Necesito Que Cada Uno De Vosotros Sea Consciente De Cómo Actúa Personalmente. Necesito que os miréis conscientemente, pues muchos de Mis hijos -demasiados, diría yo-, se niegan a actuar en Mi Voluntad porque vuestro «ego» domina cada instante de sus vidas.

No os abandonaré, Mi Amor no conoce límites, Mi Amor es infinito, pero en la medida en que Mis hijos limiten Mi Obra y Mis Acciones sobre ellos, no podré ayudarles como es Mi Voluntad.

La voluntad humana aún prevalece, y el libre albedrío vuela como papel en el viento, vaciláis demasiado y esto Me muestra que aún falta una Fe sólida y firme, y que Mis hijos no pueden amarme si no rezan, si no vienen a Mi encuentro, si no Me acogen. Sin obras, la Fe está muerta, pero la Fe necesita alimentarse de la oración, de lo contrario: ¿Qué sustento tendrá la Fe?

Amada Mía:

VOSOTROS Sois La Manzana De Mis Ojos, Os Amo En Cada Instante De Vuestras Vidas. Necesito Que Seáis

TRANSPARENTES Con Vosotros Mismos, Porque Habéis Dado Rienda Suelta Voluntariamente Al «Ego» Y

Deseáis Ser Lo Que Yo No Os He Convocado A Ser, Deseáis Imponer Vuestra Voluntad Siendo Orgullosos.

¡Cuánta humildad le falta al Hombre para reconocer en sí mismo lo que realmente es! ...

ninguna criatura humana puede decirme que fue creada negativamente, todos vosotros habéis sido creados con el Amor de Mi Padre; a lo largo del camino os habéis desviado y habéis permitido que el «ego» humano os llene de orgullo, intolerancia e imposición, pero esto no es Mi Amor y aquel que actúa así, debe enmendarse si realmente desea caminar a Mi lado.

Temen a tantas cosas!, pero no temen a lo que realmente deberían temer, es decir, al «ego» que cada uno de nosotros lleva dentro.

Deberían temer a aquellos que les influyen para matar el alma...

Deberían temer todas aquellas acciones que son contrarias a Mi Voluntad...

Pero temen a Mis seres angélicos que caminan a su lado para mostrarles Mi Amor y recordarles que Yo no les abandono.

Teméis lo que no deberíais temer y no teméis lo que deberíais...

Deberías temer ofenderme, temer actuar contra Mi Voluntad...

Deberíais temer convertiros en uno más de los que Me afligen continuamente...

Deberías temer convertirte en mis verdugos, temer ser uno de los que Me injurian...

Deberías temer convertirte en uno de los que Me coronan de espinas...

Deberías temer vivir inmerso en bajas pasiones...

Debéis temer convertiros en uno más de los que vagan por la vida, ciegos y sordos.

Hijos, los que Me escucháis, luchad con todas vuestras fuerzas en este tiempo en el que satanás se ha apoderado de la Tierra y ha derramado su veneno por completo en los corazones de los Hombres, para dominar sus mentes y así, llevaros a actuar en contra de Mi Voluntad.

Mi amado Pueblo:

Permanezco Contigo A Cada Instante, No Te Dejo Solo.

Soy Leal a Mi Pueblo, y en este instante agonizante de esta Generación, los que están aquí

DEBEN Purificarse Ante Tanto Mal, He Entregado Mi Pueblo A Mi Madre Para Que Ella Pueda Comandarlos Con Su Maternidad, Cogerlos De Las Manos Y Guiarlos Hacia MÍ.

Ella cobija a los indefensos, venid a Mi Madre como Yo lo hice cuando la necesité tan cerca de Mí; durante Mi Pasión, incluso cuando no se menciona que Ella compartió Mi Dolor, Mi Madre participó de cada uno de mis Dolores y de todo Mi Sufrimiento.

Aquella Que Está Llena De Gracia, Aquella Que Ama Sin Límites, Ella Está Y Estará Con Los Míos; Sólo Dedicaos A Ella Y Dejad Que Actúe Según Mi VOLUNTAD.

No tengáis miedo, hijos, aunque lo que veáis os haga estremecer, estad seguros de que no os abandonaré, de que nunca estaréis solos.

Estad seguros de que cada paso que dais, lo hacéis porque Yo lo doy por VOSOTROS.

Os Bendigo, Mi Paz esté en cada uno de vosotros.

TU Jesús

SALVE María Purísima, Concebida Sin Pecado

SALVE María Purísima, Concebida Sin Pecado SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO