jueves, 29 de agosto de 2013

Somos el camino hacia vuestro Nuevo Hogar.

- Mensaje nº 248 -

Oh hija mía. Mi querido hijo. Si supierais cuánta maldad hay en vuestro mundo, correríais desesperadamente hacia el Padre, esperando una mejora, un alivio, un amor por este mundo tan hermoso que Él, el Altísimo, ha creado para vosotros, pero no lo sabéis, no queréis saberlo, y la mayoría de vosotros está demasiado bien como para querer a Dios Padre en sus vidas, porque ello supondría un cambio radical y consecuente de su estilo de vida, de su forma de vivir, y como siguen estando todos demasiado bien, prefieren permanecer en su vida «abominable», porque es egocéntrica, construida sólo sobre sí mismos y sobre el poder, la codicia y la avaricia, y no queréis cambiar nada, porque tenéis miedo de salir mal parados, pero no es así en absoluto.

Es todo lo contrario y si todos corrierais a los brazos de vuestro Padre, por fin podríais estar libres de miedo y llenos de alegría, podríais vivir felices, alegres y libres, porque el Padre os lo da todo. Él, que te creó a ti y a este mundo tan maravilloso, tiene preparados para ti los mayores regalos. Él, que te ama tanto, se ocupa de Todo en tu vida.

"Él, que te ha acogido en Su corazón, te ama, cuida de ti, ¡y nada le da más alegría que vuelvas a encontrar el camino hacia Él, vayas hacia Él y vengas a Sus brazos!

¡Vuelve! Ven a Dios Padre y a Mí, tu Jesús que tanto te ama y te espera, y grande será la alegría de todos nosotros, grandes los dones que Mi, que también es tu Padre, te tiene reservados, y grande la alegría y el amor que Nosotros te daremos.

Cree y confía y ven a Nosotros, pues NOSOTROS somos el camino hacia tu Nuevo Hogar, Yo soy el camino hacia el Padre, y Mi Madre te trae a Mí.

¡Cree y confía y abre de nuevo tu corazón! Por Nosotros, por el Padre, por Mí y por Mi Madre.

Te quiero tanto. ¡Te amamos tanto!

Tu amorosa Madre del Cielo y tu amoroso Jesús.

Amén".