domingo, 29 de agosto de 2010

Fiesta de la Martirio de San Juan Bautista

Mensaje del Arcángel San Miguel

"Queridos Hermanos Míos, YO, MIGUEL ARCÁNGEL, servidor del Señor, su protector y defensor, los bendigo una vez más hoy.

Luchen la buena lucha, contra las fuerzas del mal, contra el pecado, contra la injusticia, contra toda clase de ataque contra la Ley del Señor, contra Sus derechos, contra la verdad conocida como tal, contra el adorable amor del Señor y Su Santísima Madre.

Luchen la buena lucha, luchando siempre más por la verdad, defendiendo siempre más la verdad de las Apariciones y Mensajes de María Santísima, no teniendo misericordia de aquellos que luchan contra ella, es decir, no perdonando sus mentiras, no perdonando su impiedad, su maldad, su dureza de corazón y siempre más, refutando, rechazando y aplastando las mentiras, injurias y ofensas que levantan contra la Madre de Dios oponiéndoles cada vez más la fuerza de la verdad, difundiendo los Mensajes de la Madre de Dios, haciéndolos el eco de estos Mensajes, yendo de casa en casa, haciendo los Cenáculos que les envió, así haciendo que la Voz de la Verdad, la voz de la Madre de Dios alcance cada vez más lejos, cada vez más lejos, para que toda la oscuridad de las mentiras, toda resistencia a la Madre de Dios, todo amor y apego al pecado y las cosas del mundo, sean aplastados a los pies del Señor y de la Madre de Dios, como el diablo aplastado está siempre bajo mis pies.

Luchen la buena lucha, siendo cada vez más una luz viva, intensa y ardiente en el mundo para que el mundo vea su luz, salga de la oscuridad, conozca la luz del Señor y venga a la luz que salva, ilumina y disipa toda oscuridad.

Si son luz, luz de santidad, luz de gracia, luz de amor, luz de fe, ejemplo de obediencia de la fe y amor por Dios, si son esta luz por palabra, por obra, por su búsqueda continua de santidad, verdad y bien, entonces aplastarán el mal, harán que el bien triunfe dondequiera que vayan, dondequiera que lleguen, y así las almas conocerán la verdad y la verdad los liberará, los salvará y los traerá a Dios.

Luchen la buena lucha, buscando cada día más y más, hacer violencia a ustedes mismos, es decir, luchar contra sus malas inclinaciones, contra su naturaleza corrompida que siempre excita en ustedes la lujuria, la avaricia de los ojos, la vista, la búsqueda del orgullo, la satisfacción de sus deseos corporales, esta lujuria que los hace también deslizarse entonces en el orgullo de la vida, que cierra su alma a los rayos de la gracia divina, que cierra su espíritu al movimiento del Espíritu Santo, y que hace que su interior se hunda cada vez más en la oscuridad del pecado, el orgullo, la rebelión, la indolencia hacia la voluntad de Dios, así haciéndolos cada vez más como Satanás, el Lucifer padre del orgullo, el primero soberbio que arrastró tras de sí a todos aquellos que pecaron por orgullo, para que de esta manera, caminando más y más el camino de la humildad, de la renuncia de ustedes mismos, del desprecio del mundo y de la lujuria de su naturaleza, puedan más y más superar ustedes mismos y así, como verdaderos campeones, como verdaderos victoriosos, puedan acercarse cada vez más a esa gran victoria, Esa gran santidad, esa gran vida libre y feliz que Dios les ofrece, que es la vida de unión con Él, de amistad con Él y de total libertad de todas esas cosas del mundo y de la carne que quieren esclavizarlos y convertirse en gusanos viles, esclavos viles de las cosas de este mundo que no valen nada, que son nada.

Luchen la buena lucha, buscando siempre más servir a Nuestra Reina Celestial con un amor más puro, con una docilidad más pronta, con una obediencia cada vez más ciega y total para que en su vida puedan cumplir cada vez más perfectamente Su voluntad, la voluntad divina, y en su vida Dios pueda escribir cada día, cada vez más Su firma de aprobación, es decir, el sello de que verdaderamente viven según Su voluntad, viven según Sus diseños divinos y son los verdaderos amigos e hijos del Señor.

Imiten Mi obediencia pronta! Imiten Mi prontitud en el servicio del Señor, en el servicio de la Virgen María y así, verdaderamente, serán como Yo: el servidor fiel, el guerrero feroz que siempre lleva a cabo la voluntad del Señor cada vez más y hace resonar el grito vibrante:

DIOS, ¿QUIÉN ES COMO DIOS? NADIE ES COMO DIOS!

Oren, oren Mi oración todos los días, porque su generación tiene una necesidad desesperada de Mi protección, Mi ayuda y Mi apoyo para escapar de las trampas de Satanás. Oren la oración 'Luchando con San Miguel', para que Yo pueda siempre protegerlos cada vez más y liberarlos de las emboscadas de Satanás. Oren Mi Rosario, oren las oraciones dedicadas a todos los Ángeles para que Nosotros podamos siempre ser su compañía, siempre presentes y siempre con la posibilidad de ayudarlos, porque estas oraciones abren su corazón, modelan su voluntad, inclinan su voluntad a ser dóciles a Nosotros, a Nuestras inspiraciones, a Nuestra acción, a Nuestra voluntad, a Nuestra dirección, a Nuestra guía santa.

A todos ustedes en este momento, los bendigo generosamente, con todos los Ángeles y Santos del Señor.

Permanezcan en la paz del Señor. Permanezcan en la paz del Señor, Marcos elegido Mío, queridos Míos".

Nota: El vidente Marcos Tadeu nos pidió que oremos por Brasil.