domingo, 28 de agosto de 2016

Domingo, 28 De Agosto De 2016

Domingo, 28 de agosto de 2016: (Misa con el Cardenal Norberto Rivera)

Jesús dijo: «Pueblo mío, sé que siempre tendréis a los pobres con vosotros, pero es necesario que los respetéis como prójimos y los améis por amor a Mí. Rezad para que tengan comida para vivir y un lugar donde alojarse. Cuando sea posible, haz donativos a tu despensa local y a las organizaciones dignas que ayudan a los pobres. Al presenciar la hermosa Misa del Cardenal Norberto Rivera, presenciaste también el amor que el pueblo mexicano siente por Mí y por Mi Iglesia. Amo a todo el pueblo de México, como amo a todos los pueblos del mundo.

Cuando llegaste a la Catedral, viste a indígenas con tambores. Al principio te pareció entretenido, pero después viste danzas con incienso que daban a espíritus que no conocías. Si no me rinden culto a Mí, entonces están adorando a los espíritus malignos que debes evitar. Tal adoración está trayendo el mal entre la gente. Rogad a Mis ángeles que os protejan de tal mal. Sería mejor que borrarais ese culto maligno de vuestras cámaras para que no traigáis el mal a vuestros hogares o a vuestra misión.»

Jesús dijo: «Hijo mío, acabas de ver a un ladrón que quería robaros los bolsos, pero le viste a tiempo, así que se marchó. Una cosa es que un ladrón os robe vuestras posesiones, que pueden ser reemplazadas. Otra cosa es que veas a demonios que intentan robarte el alma que no se puede reemplazar. Estos demonios intentan involucrarte en adicciones para poder controlarte y hacerte débil ante pecados más graves. No dejes que nada terrenal te controle, sino que debes depender de Mí para todo. Debes detener cualquier adicción antes de que puedan controlarte, así que no empieces con ellas. Cuando sientas que te atacan espíritus malignos, invócame y enviaré a Mis ángeles para que te defiendan. Mantente en guardia en todo momento para que puedas evitar a cualquier demonio que intente robarme tu alma. Yo soy tu Señor y Maestro, y sólo debes adorarme a Mí, y depender de Mí cada día».