miércoles, 29 de marzo de 2017

Miércoles, 29 De Marzo De 2017

Miércoles, 29 de marzo de 2017

Jesús dijo «Pueblo mío, como la nieve está a punto de desaparecer, estáis viendo muchos signos de la primavera, con un tiempo más cálido y días más largos de luz solar. Oís el piar de los pájaros, y veis los nuevos brotes en los árboles, y algunas flores tempranas. También faltan pocas semanas para que asistáis a los servicios de Semana Santa. Igual que estás haciendo limpieza de primavera en tu jardín lleno de ramitas, también deberías pensar en limpiar tu alma para el Domingo de Resurrección. La Cuaresma es un buen momento para confesarte junto con tus ayunos y penitencias. Tu ayuno está entrenando a tu cuerpo para que esté más controlado por tu alma, de modo que puedas controlar tus deseos y pasiones corporales. Son los deseos de tu cuerpo los que pueden arrastrarte al pecado y a las adicciones. Ruégame que te ayude a controlar tus adicciones y tus malos hábitos. Limpiando tus imperfecciones, podrás mantener un alma pura. Mantén tus deseos contenidos durante el resto de tu Cuaresma Conmigo».

Dijo Jesús: «Hijo mío, estás viendo un túnel y una rueda que era señal de una revisión de los acontecimientos de tu vida. Éste es otro signo de Mi próxima experiencia de Advertencia. Toda la gente de la tierra experimentará esta revisión de vida y un mini-juicio. Esto será Mi misericordia para con Mi pueblo, y una oportunidad para que las almas se conviertan antes de que puedan perderse en el infierno. Si las personas no Me aceptan y cambian sus caminos, entonces no recibirán una cruz en la frente. Sin esta cruz de los fieles, no se permitirá a la gente entrar en Mis refugios. Aquellas personas que sean fieles y se arrepientan de sus pecados, serán marcadas con una cruz por Mis ángeles. Sólo Mis fieles con la cruz en la frente podrán entrar en Mis refugios. Tendrás seis semanas después de Mi Advertencia para instruir rápidamente a los miembros de tu familia en los caminos de la fe. Si no se convierten a la fe, se arriesgarán a perderse en el infierno. Puedes trabajar duro para convencerles de que se despierten, pero al final será su libre albedrío el que decida si quieren ser uno de Mis discípulos. Sigue rezando para que tus familiares y amigos se salven».