miércoles, 28 de octubre de 2015

Mensaje dado por Nuestro Señor Jesucristo

A Su Amada Hija Luz De María.

Mi amado Pueblo,

Mi Amor es bendición para cada uno de vosotros.

MI Amor pone fin al Mal que acecha a la HUMANIDAD.

Necesito que todos Mis hijos permanezcan unidos y fundidos en Mi Voluntad; los necesito a todos presentes, siendo Mis fieles discípulos llevando Mi Palabra a cada uno de vuestros hermanos.

Pueblo Mío, a quien he dado todo Mi Amor, vengo hoy a pediros vuestro amor como respuesta a Mi Donación.

He creado al hombre con libre albedrío precisamente para que decida libremente hasta qué punto queréis seguirme, hasta qué punto queréis cumplir Mi Voluntad y qué medida Me presentaréis cuando os examine en obediencia hacia Mí.

Necesito hijos convencidos, decididos a convertirse, para que su conversión les lleve a donarse a Mí y a dejarlo todo por Mí.

En este instante, las criaturas humanas se sumergen en todo lo que les atrae; y lo que atrae al hombre es lo que le aleja de todo lo relacionado con Mi Casa.

MI Llamada Es Una: OBEDIENCIA.

Mi amado Pueblo, para Mis verdaderos discípulos -aquellos a los que llamé la primera vez- bastó una Palabra Mía; bastó una Llamada para que Me siguieran. Así es como deben actuar y trabajar los discípulos de este instante. Este discípulo no necesita que Yo le hable continuamente, como hago en este instante, porque Me tiene arraigado en su corazón y, así, Me escucha constantemente, porque vive constantemente sumergido en Mí; no trabaja y no actúa en su libre albedrío humano, que le mantiene inmerso en lo mundano, porque sabe que el libre albedrío es un Don Nuestro para que pueda decidir tomar y seguir el Camino Verdadero.

Por eso Mis hijos fieles no viven de instantes, no viven de ilusiones, no viven dependiendo de lo que les pueda o no pasar en el camino, porque saben que pase lo que pase es Mi Voluntad. Es muy diferente cuando Mis hijos actúan bajo la opresión del libre albedrío sin escucharme; entonces es cuando su camino estará saturado de contratiempos, imprevistos, situaciones que surgirán de repente y les harán sentir que no saben qué hacer. Eso es señal de actuar según el libre albedrío humano, y esos actos y obras no son Mi Voluntad.

Escuchad y haceos estas preguntas

¿Cómo actuáis?

¿Cuánto amáis a vuestros semejantes?...

¿Qué das en Mi Nombre? ¿Verdad o hipocresía, amor o rechazo?...

NIÑOS, no minimicéis la ORACIÓN...

Amados Míos, todos vosotros habéis recibido de Mí un legado, una Gran Enseñanza que ningún verdadero cristiano debería omitir: La Oración. Ninguno de Mis hijos nació siendo un sabio predicador, y ninguno de Mis hijos nació conociendo toda Mi Palabra. La vida de cada uno de vosotros es una práctica constante de Mi Palabra, de Mi Donación, de Mis Enseñanzas, de Mi Ley.

TÚ Tienes Mi Ejemplo: Me Retiré A Rezar A Solas Con Mi Padre. Mis Hijos Verdaderos no pueden dar testimonio de Mí si no se retiran a orar a solas con Nuestra Trinidad, porque si no actúan y trabajan así, están actuando y trabajando bajo el imperio del libre albedrío. Mis hijos saben que ni siquiera Yo, el Hombre-Dios, actué sin retirarme primero a orar a solas con Mi Padre. La razón es que, en medio del ajetreo de la vida cotidiana, no podéis estar atentos a las inspiraciones de Mi Espíritu Santo. Algunos de Mis hijos se creen iluminados y por eso piensan que no necesitan retirarse a orar a solas con Nuestra Trinidad, piensan que no necesitan escuchar la inspiración, el discernimiento y la iluminación de Mi Espíritu Santo para actuar y obrar.

Debéis estar abiertos a conocer Mi Palabra en la Sagrada Escritura y allí encontraréis la respuesta a todas vuestras preguntas e inquietudes, porque Yo digo: «Quien no está conmigo, está contra mí». (Mateo 12,30) Si no amas a tu hermano, no Me ames a Mí, y no vengas a recibirme en la Eucaristía; si no bendices a tu hermano, no Me bendigas a Mí.

¡Ay de los que hacen leña del árbol caído! Fariseos e hipócritas son los que pretenden conocer Mi Ley, y esperan una Palabra Mía para lanzarse como aves de rapiña sobre Mis instrumentos. «Que cualquiera de vosotros que esté libre de pecado sea el primero en arrojar una piedra». (Juan 8:7) No olvidéis que perdoné al buen ladrón, pero la humanidad debe ser consciente de que no actúa ni obra según Mi Voluntad.

Los que os llamáis cristianos y venís orgullosos a Mis Templos y decís «yo soy católico»... aún no conocéis Mi Ley en profundidad, no conocéis Mi Palabra y os dedicáis a criticarla como dioses humanos, y por eso no la ponéis en práctica. A todos les explico la Verdad y aun así siguen negando acontecimientos que a lo largo de los tiempos Mi Madre ha profetizado y que se cumplirán antes de que termine esta generación. Hipócritas son los que viven negando las Llamadas de Mi Madre: dado que Yo soy Dios y Mi Madre, Madre de la humanidad, ¿qué Dios permitiría que las apariciones de Su Madre y Su Palabra revelasen lo que no se cumplirá?

No, hijos, Yo no soy un Dios de ambigüedades; Mi Palabra no está sujeta al liberalismo de cada generación; Mi Palabra es concreta, es una, real y verdadera.

La obediencia en Mi Pueblo es obedecer constantemente Mi Palabra expresada en la Sagrada Escritura y en la Ley que Mi Padre dio a Moisés: Los Mandamientos. La Palabra Divina es una, no está sujeta a interpretaciones, PERMANECE EN VIGOR HASTA EL FIN DE LOS TIEMPOS.

Amados, orad dadas las provocaciones entre las grandes Naciones para acercar la guerra.

Amados, orad, sed perseverantes, todos debéis orar y, unidos en oración, creced hasta fundiros con Mi Voluntad. Amados, orad; el agua purifica al hombre.

Mis hijos saben con certeza que no los pongo en manos ajenas a Mi Amor, saben con certeza que uno puede tener la fuerza de mil hombres si su fe es del tamaño de un grano de mostaza, saben con certeza que envío Mi Protección, la que anuncié que enviaría en los instantes de tribulación. El hombre no sabe esperar, hace conjeturas anticipadas sobre lo que anuncio cuando se preguntan a quién enviaré: Unos piensan que será un Ángel de Mi Corte Celestial, otros lo imaginan con grandes alas bajo las que se cobijarán, otros dicen que se confundirá con el anticristo. Ah... hijos, «Yo soy el que soy» (Éxodo 3:14) PAZ, Amor, Seguridad, Confianza; Yo No Soy CONFUSIÓN.

Mi Pueblo nunca ha sido abandonado. Mi Protección volverá a Mi Pueblo a pesar de ser rechazada de nuevo, Mi Palabra llegará para ser recordada y será despreciada de nuevo.

Hijos Míos, la mayor parte de la humanidad ha emprendido un camino de dolor al aceptar la irreverencia hacia Nuestra Trinidad; poco a poco el hombre atraerá su propio libre albedrío utilizado incorrectamente y en rebelión contra Nuestra Augusta Majestad.

Necesito Personas Bien Dispuestas a Seguir Mis Enseñanzas. Ninguna oración por pequeña que sea es infructuosa si proviene del fondo del corazón, del deseo, de la disposición de aquellos que son Míos para ser verdaderos y fieles. Mi Voluntad no es inactiva, no permanece estática, es una práctica continua de cada Palabra Divina en la que mantengo a Mi Pueblo para que crezca y se nutra, crezca y se purifique en el cumplimiento de la Ley Divina, crezca y viva sediento de Mí y de Mi Madre.

Necesito Personas Decididas a Cumplir la Palabra Divina para que no se dejen engañar por las voces de «lobos con piel de oveja» (Mateo 7:15) que merodean a Mi Pueblo; cuando estén unidas en oración y pidan discernimiento a Mi Santo Espíritu, ahondarán en Mi Voluntad donde encontrarán que, en cuanto su libre albedrío se ponga en Nuestras Manos y en las Manos de Mi Madre, la fusión de la criatura con su Creador le permitirá disfrutar del Cielo antes de tiempo.

Permanecéis bajo Mi Protección. Yo te amo. Te bendigo.

TU JESÚS

SALVE María Purísima, Concebida sin Pecado.

SALVE María Purísima, concebida sin pecado.

SALVE María Purísima, concebida sin pecado.

REFERENCIA : La Biblia utilizada esNew Revised Standard Version Catholic Edition