jueves, 17 de noviembre de 2016

Mensaje de la Santísima Virgen María

A Su Amada Hija Luz De Maria.

Amados hijos de Mi Inmaculado Corazón:

MI Corazón os cobija a todos para que en él permanezcáis dentro del verdadero AMOR.

No abandonéis el camino por el que os pido que viajéis; permitidme interceder ante Mi Hijo, manteneos asidos de Mi Mano.

Cada uno de los Míos es custodiado por sus compañeros de viaje, los Ángeles, y alertado cuando estáis en peligro de caer en el mal.

Hijos, es necesario para el avance espiritual personal y luego comunitario que cada uno de Mis hijos elija verse interiormente, por doloroso que sea encontrarse con la realidad de cómo funcionáis y actuáis. Sois capaces de veros interiormente para corregir lo que debéis corregir en la vida, sobre todo lo que concierne al ego humano y al trato a los demás.

El hombre no actuaría en el mal tan repetidamente si dejara de mirar el mal que aparentemente juzga en su hermano y se viera a sí mismo definitivamente a la luz de la Verdad.

Cuando el hombre se mira interiormente en espíritu y verdad, encuentra a Mi Hijo en lo más profundo de su ser interior, esperándote para proporcionarte una conciencia más profunda del Amor Divino y del deber del hombre como hijo de Dios.

Hijos míos, en este instante en el que abundan las corrientes ideológicas erróneas, estáis llamados a prestar atención ante la confusión en la que vivís. Lo que os ofrecen las nuevas corrientes ideológicas, espirituales, para que encontréis a Mi Hijo mediante prácticas de concentración o relajación, sin tener en cuenta el estado del alma, es algo completamente erróneo.

Necesitáis seguir a Mi Hijo y encontrar en Él lo que el mundo nunca os dará. En este instante en que gran parte de la Iglesia de Mi Hijo permanece inundada por la masonería y los Illuminati, Mi Corazón se aflige por la incompatibilidad de estas sociedades secretas con la religión que Mi Hijo instituyó.

Altos cargos de la Iglesia de Mi Hijo están bajo el poder de la masonería, desatando una gran confusión en cuanto a la aceptación de normas contrarias a la Ley de Dios. Estas prácticas han atraído el humo de satanás hacia la Iglesia de Mi Hijo, tomando el poder para ocultar su verdadera intención.

Hijos míos, debéis conocer la Sagrada Escritura para reconocer la diferencia entre el Verdadero Camino hacia Mi Hijo y los diversos caminos erróneos que conducen a la adoración del cuerpo, de la Creación y de satanás.

No olvidéis que en este instante el demonio ha activado todos sus tentáculos para arremeter contra vosotros sin que lo percibáis. El hedor del enemigo del alma cubre las calles de las ciudades, esparciendo odio y confusión sobre la Humanidad, que camina desorientada, escuchando diversas voces, hundiéndose instante a instante en el error, en la negación y actuando al margen de los Mandamientos. El mal ha invadido la Humanidad, ha alcanzado niveles de poder impensables, dentro de la religión de los pueblos: poder económico, social, político y moral; se ha apoderado de la tibieza de Mis hijos, y hace que, bajo la apariencia de fraternidad, no sean verdaderos cristianos ni verdaderos hijos de Dios.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, debéis prepararos para no ser engañados y conducidos hacia el mal. Conoced a Mi Hijo, conoced la Voluntad Divina para Su Pueblo; no podéis creer que estáis salvados si vuestro trabajo y acción no están de acuerdo con la Ley de Dios, los Sacramentos y otras obras de Misericordia.

El cambio en ti comienza con el reconocimiento de tu trabajo y acción personales. Si no se hace este reconocimiento, caminarás arrastrando tras de ti las cadenas que te atan al mal. No encuentro un hombre nuevo sin que se haya reconocido pecador, se haya reconocido orgulloso, se haya reconocido débil y haya solicitado la Asistencia Divina.

PREPARAOS para ser nuevas criaturas, renovadas por el AMOR Divino.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, la Humanidad se niega a reunirse con Mi Hijo, el consuelo que os ofrece el mal os aleja del misterio de la Cruz.

Despreciáis el don de la vista al negar que el mal vive en la Humanidad en este instante. No actuáis bien, no os comprometéis a un cambio definitivo hacia las buenas obras, os burláis de los que se esfuerzan por vivir en obediencia a la Palabra Divina.

El hedor del pecado de la Humanidad ha hecho que la tierra se derrumbe en varias partes del mundo; no quiere seguir soportando sobre sí el pecado continuo del hombre. La debilidad ante el pecado se muestra una vez más en la historia humana, el alejamiento de la Ley de Dios evidencia la tibieza espiritual de un gran número de seres humanos.

Las fechas sobre La Advertencia, El Milagro, El Castigo, las catástrofes, sobre Los Días de Tinieblas y La Segunda Venida de Mi Hijo se extienden como el viento por todo el mundo.

Hombre de Dios: ¡Prepárate Como Si Tu Día Fuera El Último Que Vivirás!

No seas como los hipócritas que esperan con expectación ser examinados para pedir perdón y eximirse así de la pena de sus pecados; olvidan que Dios conoce lo más mínimo de sus pensamientos, obras y actos.

Mi Hijo vendrá sin previo aviso, por lo que tomará a Su pueblo y le permitirá examinarse a sí mismo.

Debes ser consciente de la urgencia de este instante y no ser como los necios que niegan los signos de este instante para engañar a los ingenuos.

"Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente » (Mt

22:37) , y »... a tu prójimo como a ti mismo » (Mt 22:39) . LA SALVACIÓN DE LAS ALMAS CONTINÚA CON LOS MISMOS REQUISITOS, SIN CAMBIOS EN LA LEY, SIN CAMBIOS EN LA SUSTANCIA DE LA DOCTRINA, SIN CAMBIOS EN LA PALABRA DIVINA. Amado, Recibe A Mi Hijo, Debidamente Preparado.

Te Llamamos A Un Cambio Interior, Que Es: Ser Receptivo A La Iluminación Del Espíritu Santo, Para Que No Veas Las Cosas Sólo Desde Fuera, Sino Su Esencia. En Ese Mirar La Esencia, El Alma Busca A Dios, Con Un Movimiento Continuo Hacia Lo Que Es Superior.

Amada Mía, el instante se precipita a gran velocidad, es más, debo expresarte que la Tierra gira con mayor velocidad; en la medida en que el instante es más corto, las semanas pasan rápidamente sin que te des cuenta. De ahí la urgencia del cambio interior: los acontecimientos se acercan a toda velocidad.

El mal está haciendo estragos en las casas de formación religiosa; el mal distrae la mente del hombre; el mal destruye los hogares; el mal acelera la guerra en su plenitud; el mal aleja al hombre de Dios ofreciéndole todas las posibilidades de pecado para que viva en una mentira constante.

El hombre se viste de mujer, siendo éste un signo más del instante en que vives. Así vivían en los tiempos de Sodoma y Gomorra, en la depravación. Las mujeres buscan el placer de la carne; se ofrecen sin vergüenza. Culpáis al mal, por eso os menciono el mal, el mal, y no es el mal como tal, sino la entrega del hombre a todo lo que no está bien y el alejamiento que el hombre ha tomado de la Ley de Dios lo que ha abierto la puerta al demonio para que destruya al hombre y el hombre destruya la Creación. Hijos, esto ya ha sucedido; en este instante el hombre está recibiendo el producto de su locura.

Todo lo que ocurre ha sido manejado por las hordas del demonio que, intuyendo el examen personal de las almas, está acelerando su ataque para ganar almas para sí.

Amados, la Advertencia está realmente a las puertas de la Humanidad, por tanto arrepentíos, no dejéis que vuestra alma se pierda.

Rezad hijos Míos, rezad, veréis en lo alto el fuego que rodea la Tierra.

Rezad hijos Míos, rezad por los Estados Unidos, el poder de los económicamente poderosos sorprende a la nación. Las revueltas raciales no se harán esperar. Este suelo tiembla.

Rezad hijos Míos por Rusia, el lobo se esconde tras la piel de cordero.

Rezad hijos Míos, rezad por Dinamarca, será sacudida.

Rezad hijos Míos, por Italia, será sorprendida por el terrorismo.

Esta generación será testigo de las Palabras de Mi Hijo en el Monte de los Olivos.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, este instante no debe tomarse a la ligera, sino con la conciencia de lo que vale la Vida Eterna. Y asemejándoos a Mi Hijo, mirad hacia arriba, mirad hacia arriba, os sorprenderéis.

El esfuerzo debe ser doble; el que desea servir a Mi Hijo debe servir con lealtad. El que es tibio es vomitado de la boca de Dios. Uníos, ayudaos mutuamente, sed testimonios vivos del Amor de Mi Hijo.

Os bendigo en Mi Corazón Inmaculado.

Madre María.

SALVE María Purísima, Concebida sin PECADO.

SALVE María Purísima, Concebida sin PECADO.

SALVE María Purísima, concebida sin pecado.