martes, 15 de agosto de 2023

Mi Amado Ángel de la Paz Acude en Ayuda de Quienes Le Piden que Abata al Demonio

Mensaje de la Santísima Virgen María a Luz de María el 13 de agosto de 2023

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, os bendigo, os amo, sois Mis hijos.

Vengo de nuevo ante cada uno de vosotros, ante la Humanidad para daros la Miel de Mi Amor de Madre...

Vengo A Guiaros Hacia Mi Divino Hijo...

Vengo A Despertarte De La Somnolencia Con La Que Miras Todo Lo Que Sucede, Sabiendo Que El Eje De La Vida Espiritual Es Mi Hijo Divino Y Sin Mi Hijo Divino No Eres Nada, Y Lo Sabes....

Os llamo a tomar la iniciativa como hijos de Mi Divino Hijo para orar en unidad, en fe y en abandono a la Voluntad del Padre.

La humanidad, dominada por todo lo que llega al inconsciente, se encuentra derrotada por un sistema que tiene un único objetivo: el poder sobre los valores morales para socavar a toda criatura humana.

De aberración en aberración, de sacrilegio en sacrilegio, de caída en caída, la humanidad se acerca a su propia purificación.

En medio de enfermedades (1), de nuevas disposiciones para pasar de un país a otro, en continuas luchas y ataques entre países, la guerra toma peso y estalla.

Rezad hijos Míos, rezad, la guerra está lejos y no está lejos.

Rezad hijos Míos, rezad por Francia; rezad por África, ¡es necesario!

Rezad hijos Míos, rezad por Oriente Medio, la oración es necesaria.

Orad hijos Míos, orad por la humanidad.

Amados de Mi Corazón Inmaculado, la Tercera Guerra (2) se da ante la rebelión, la falta de conversión de la humanidad y por el rechazo de Mi Divino Hijo.

Estad seguros de que os encontráis en la recta final del cumplimiento de Mis Profecías.

Sin esperar, sin demora, convertíos ahora, hijos Míos.

Las tinieblas están cubriendo la Tierra, apagando las mentes, endureciendo los corazones, levantando voces contra Mi Divino Hijo, dividiendo a los miembros de las familias y alejándolos de Dios.

Las tinieblas, son las tinieblas del Diablo, llegaron primero a algunos de Mis hijos, los tomaron, congelaron sus sentimientos, vaciaron su amor y los invadieron con intereses de todo tipo.(3)

Mi Amado Ángel de la Paz (4) acude en ayuda de quienes le piden que acabe con el Demonio, para sacarlo de las criaturas humanas que viven con un corazón de piedra inundado por intereses materialistas y ajenos a vivir según la Voluntad de Mi Divino Hijo.

Esa oscuridad espiritual que avanza junto con el extravío, el engaño, y resuena en las criaturas que carecen de Dios.

Pedid en oración la venida del amado Ángel de la Paz.

Pide en oración por ti, Fiel Remanente.

¡Arrepentíos, Reparad, Rezad!

Os bendigo con Mi Amor.

Conversión Hijos Míos, ¡Conversión!

Mamá María

Ave María Purísima, Concebida Sin Pecado

Ave María Purísima, Concebida Sin Pecado

Ave María Purísima, Concebida Sin Pecado

(1) Sobre las Enfermedades, lee...

(2) Sobre la Segunda Guerra Mundial, lee...

(3) Sobre las trampas para demonios, lee...

(4) Sobre el Ángel de la Paz, lee...

Comentario de Luz De Maria

Hermanos:

Nuestra Madre Santísima nos llama a abrir nuestra mente y pensamiento para que no caigamos en las tinieblas de quien, lleno de intereses mundanos, deja a Dios en segundo plano.

Nuestra vida es Cristo, nuestra voluntad es la Suya, y con esa certeza caminamos para que los intereses mundanos no superen la Voluntad Divina.

Sabiendo que somos criaturas de Dios, al primero que debemos glorificar es a Dios, para dar testimonio de Su Amor.

Nuestra Madre insiste en la conversión porque el tiempo es urgente. Hay muchos que no creen y Nuestra Madre nos advierte una vez más del peligro que corremos como humanidad, ante la temida tercera guerra mundial.

Ella nos llama a rezar, porque la oración logra lo que las palabras no pueden lograr, aunque sean de gran sabiduría. Nos llama a rezar, porque tal vez eso es lo que saben hacer los humildes y los sencillos de corazón.

Hermanos,

Atended a la llamada de Nuestra Madre:

Madre Santísima, que nos miras desde lo alto

y mirando las ingratitudes de estos Tus hijos,

no desistas y llama cuantas veces sea necesario.

Madre, Tesoro del cielo, luz de la humanidad,

dame la fuerza para levantarme cuando caiga en mi camino;

Tú sabes en lo más profundo de mí

que no deseo separarte de mí.

Te suplico, Madre Misericordiosísima

enséñame a vivir, descubriendo que lo importante

es vivir a semejanza de Tu Divino Hijo;

sin miedo al mañana,

porque en ese mañana Tú estarás a mi lado.

Me llenas de un nuevo renacer,

de una nueva oportunidad de ser mejor.

Enséñame a ser humilde para que Tu Hijo me reconozca.

Dame Tu luz Madre, que ilumina todo lo que Tú tocas,

No quiero brillar ante el mundo,

sino desear que Tu luz me dé sabiduría para amar a mis semejantes

y para saber perdonar como Tú lo haces.

Bendíceme, Madre para seguir viviendo

y por Tu Mano condúceme a Jesús.

Amén.